Ser Empresario al Estilo Japonés (Carlos Kasuga Entrevista)

El Presidente de Yakult Carlos Kasuga un éxito en México, una extraordinaria historia y una "verdadera filosofía empresarial con mentalidad japonesa".

Carlos Kasuga vivía en México es descendiente japonés que sabía hablar el idioma pero no sabia leerlo ni escribirlo por ello sus padres lo mandan al Japón para aprender bien el japonés.

Es así que estando en Japón visita la 1ra.feria industrial japonesa después de la segunda guerra mundial. Visitando ésta feria vio una máquina que estaban haciendo salvavidas y pelotas de playa le llamó mucho la atención, en ése tiempo en México sólo usaban las cámaras de automóviles de llantas para nadar y divertirse.

El se le ocurrió la idea de traer las máquinas a México, es decir importarlas ya que allá sería un BOOM.

Pero ellos dijeron que el producto terminado en México en ése entonces estaba prohibido, a lo que ellos le dijeron entonces ¿Por qué no nos compra Ud. nuestras máquinas? a lo que Carlos respondió Ay..qué chistoso, si se descomponen ¿quién me las va a arreglar allá?..a lo que ellos respondieron: "Nosotros le enseñamos las partes principales en las que posiblemente se lleguen a descomponer"..

Es así que como Carlos tenía que escribir a su papá un diario de sus avances en japonés y allí les dijo que había visitado la feria y lo que sería un BOOM en México.

En ésa época el correo se tardaba más de 30 días en ir, y venir y a él ya se le había olvidado la idea.
Cuando un día llegó al internado donde él vivía el dueño de ésta fábrica japonesa enseñandole una carta donde le decía que dejara la Universidad y se fuera a trabajar a su fábrica lo que fue una sorpresa para él.

En ésa fábrica japonesa el estuvo 9 meses, y fue la mejor lección de empresa y de lo que es un "verdadero empresario" .

"Me asombraba de cuando llegábamos en la mañana a la empresa el dueño estaba barriendo la fábrica con su overol, todos hacían pipí y popó en los mismos baños, y cuando salía a hablar con un proveedor o cliente se cambiaba se ponía la corbata y salía y cuando regresaba se volvía a poner el overol, trabajaba al parejo de todos nosotros, siempre era el primero en llegar y el último en irse. Y dos veces al año él nos hacía una excursión donde se llevaba a todos sus trabajadores a una parte turística de Japón y allí era un saque de geishas y destape total y allí los trabajadores le hablaban todas las inconformidades que sentían y les daba la razón , y éso es lo que aprendí de ser empresario al estilo japonés".

Todo lo que cuenta éste empresario es cierto, así trabajan en Japón, aunque las empresas más grandes en Japón ya no tienen éstos contactos con su gente, mucha de política se ha vuelto más fría y sólo se fijan en la "producción de sus empleados", pero la buena experiencia de éste empresario le ayudó a ser lo que ahora él es y ha logrado.